Muchas personas dudan en solicitar la ayuda de un arboricultor, porque temen que éste resuelva todos los problemas con una motosierra. Pero no es así; de hecho, los arboristas recurren a diversas técnicas para ayudar a los árboles. A menudo es posible sostener los árboles, en lugar de eliminarlos.
Y una de las formas más eficaces de hacerlo es mediante el uso de cables, tirantes y puntales. A continuación hablaremos brevemente de cada uno de los tres métodos.
Cables
El cableado es el método más común por el que los arboricultores proporcionan soporte estructural a los árboles. Básicamente, consiste en fijar diversos tipos de cables y herrajes de alta resistencia a otras ramas más fuertes, al tronco, al suelo o a otros anclajes. A veces, los cables se ensartan de formas relativamente sencillas, pero en ocasiones los arboricultores consideran necesario crear una "red" de cables más compleja para proporcionar el tipo de soporte que necesita el árbol.
El cableado se utiliza sobre todo para evitar que las ramas de los árboles se partan en su unión. Sin embargo, también puede utilizarse para proporcionar soporte a ramas inusualmente largas o reforzar especies de madera débil. Aunque pueden utilizarse infinidad de materiales y técnicas de sujeción en el proceso de cableado, la mayoría de los sistemas suelen entrar en una de estas dos categorías: estáticos o dinámicos.
Sistemas de cableado estático
Los sistemas de cableado estático están diseñados para sujetar las ramas de forma relativamente rígida. Suelen basarse en herrajes metálicos que se atornillan o atornillan a las ramas objetivo. Después, se utiliza cable de acero galvanizado o de aviación para conectar los herrajes fijados a las distintas ramas. Aunque los herrajes metálicos utilizados a menudo en estos sistemas permiten fijaciones muy seguras, pueden servir de lugar por el que pueden entrar hongos y otros agentes patógenos, provocando la putrefacción.
Sistemas de cableado dinámico
Los sistemas de cableado dinámico están diseñados para dejar a las ramas y al árbol un poco más de espacio para balancearse. Esto no sólo supone menos tensión para el árbol y sus ramas, sino que permite que el árbol siga produciendo madera de reacción, células especiales que los árboles producen en respuesta al viento u otras tensiones. Los sistemas dinámicos suelen utilizar cuerdas sintéticas en lugar de cables, y suelen envolver las ramas que se sostienen, en lugar de basarse en herrajes metálicos atornillados al árbol. A veces también se incorporan amortiguadores de goma a estos sistemas.
Los sistemas de cableado estático son los más antiguos de los dos sistemas, y aunque siguen siendo útiles, los sistemas dinámicos se han convertido en la opción preferida de muchos arboricultores.
Aparatos ortopédicos
Los tirantes funcionan de forma muy parecida a los cables: proporcionan apoyo tirando de una rama o tallo en la dirección deseada. Sin embargo, los tirantes son rígidos, no flexibles como los cables. Por lo general, esto significa que los tirantes se utilizan en aplicaciones distintas a las de los cables; en concreto, se emplean para sostener las bases de tallos grandes y codominantes (árboles de "tronco gemelo").
Para instalar un tirante, un arboricultor perforará primero ambos troncos o tallos. A continuación, pasa una varilla de acero por los orificios y la fija en su sitio con tuercas a ambos lados. En algunos casos pueden ser necesarias varias abrazaderas, sobre todo si ambos troncos son muy grandes. Aunque los tirantes proporcionan una gran resistencia, son un punto de entrada para la podredumbre, por lo que no deben utilizarse a menos que sea necesario.
Atrezzo
Los puntales son quizá el tipo más sencillo de sistema de sujeción de árboles, y sin duda han sido utilizados por personas emprendedoras durante cientos de años. Diseñados para "apuntalar" ramas que corren peligro de caerse, los puntales pueden fabricarse con casi cualquier cosa lo bastante rígida y fuerte para la tarea en cuestión. Esto incluye muros de mampostería, postes metálicos o postes de madera, entre otras cosas.
Los puntales se suelen utilizar para sostener ramas que aún están sanas y son deseables, pero carecen de una buena estructura o presentan un punto de sujeción débil. Esto suele ocurrir en árboles maduros, cuyas ramas más bajas son muy largas y, por tanto, pesadas. Con el tiempo, estas ramas fallarán, pero con un soporte adecuado pueden durar varias décadas más de lo que durarían de otro modo.
Los puntales también pueden utilizarse para sostener los troncos de los árboles inclinados. Sin embargo, debido a los increíbles pesos que implican los árboles grandes, esto sólo es realista con árboles de tamaño relativamente modesto.
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Como prácticamente cualquier otra técnica de cuidado de los árboles, el cableado, el apuntalamiento y el apuntalamiento son más eficaces cuando se emplean pronto. Así que deja de posponerlo y ponte en contacto con tus amigos de Trav's Tree Service si sospechas que uno de tus árboles necesita ayuda. Uno de nuestros arboristas experimentados y altamente cualificados evaluará el árbol y te proporcionará un plan para mantenerlo sano y feliz en los años venideros.